¿Las razones? No hay razones.

-Hola, ¿qué tal?, ¿cómo estás?, ¿qué te trae por aquí?, tanto que él me habló de ti, y es verdad, todo lo que me dijo es así, pero se lo olvido decir: que eres la hermosa de todas las mujeres, que eres casi perfecta, pero que no lo quieres, que no sientes lo mismo, y aunque herirlo no debes, solo queda el cariño de una pasión que muere. 

Yo sé que él es mi amigo, por eso nunca te hablé, pero hoy tengo que decirte que me enamore. Sin querer, sin razón, sin motivos, no sé como fue, pero me enamoré. Tal vez fue todo lo que él me dijo, tal vez no esté bien pero me enamoré. 

Sé que es difícil de aceptar la realidad, pero me enamoré de quién no debía. Sé que el destino jugó mal, que me equivoqué, pero ¿qué podía hacer? si yo te quería. 

Me enamoré como un loco, como nunca había pasado, como nunca imaginé que me iba a suceder. Es tu olor, tu sonrisa, dulzura y belleza, y es que cerca de ti me daba vueltas la cabeza.

Sé que no tengo justificación, pero es que me enamoré.